Brasil con Ñconsumo – Brasil con Ñ http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br El país con todas las letras Fri, 22 Sep 2017 17:43:00 +0000 pt-BR hourly 1 https://wordpress.org/?v=4.7.2 Rousseff llora por el Brasil que no pudo ser http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2015/07/24/rousseff-llora-por-el-brasil-que-no-pudo-ser/ http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2015/07/24/rousseff-llora-por-el-brasil-que-no-pudo-ser/#comments Fri, 24 Jul 2015 18:28:52 +0000 http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/?p=1560 Continue lendo →]]> POR EDU SOTOS, DE RÍO DE JANEIRO
Brasil parece haber despertado de un profundo sueño en el que las fantasías de un país más justo, equitativo e igualitario acabaron en pesadilla.
Sin embargo, la realidad que espera a la presidenta Dilma Rousseff, en los próximos tres años y medio de su segundo mandato, podría ser mucho peor que eso.

A los indicadores de la economía que se deterioran a cada día y las interminables noticias sobre la corrupción, se le unen sucesos que, a pesar de pasar inadvertidos por la gran mayoría de la población, son trágicamente representativos de la situación de un país que soñó con el cielo y terminó perdiéndose en el camino hacia las alturas.

Es la historia de Christiano Pereira Tavares, al que todos en la favela carioca de “Manguinhos” conocían como “Lulinha”.

En 2008, cuando apenas tenía 8 años, la imagen de portada del diario “Extra” en la que Christiano nadaba sonriente en las aguas de una alcantarilla de su favela causó gran conmoción en todo Brasil y, en especial, en el entonces presidente Lula da Silva.

Inmediatamente, Lula decidió ayudar a la familia de “Lulinha” proporcionando un empleo y una vivienda social a su madre, a la vez que prometió una piscina a todos los habitantes de esa comunidad.

Una promesa que fue cumplida y  que en su ceremonia de apertura tuvo como protagonista a un pletórico “companheiro Christiano”. Un mote con el cual el ex presidente solía llamar al menor.

En las fotos de aquel momento triunfal para Brasil no faltó una sonriente Dilma Rousseff, que por aquel entonces ya se perfilaba como el brazo derecho de Lula en su papel de ministra de la Casa Civil. Junto a ella, el gobernador del estado de Río de Janeiro, Sérgio Cabral, y el alcalde, Eduardo Paes, completaban la puesta en escena.

El niño que disfrutaba en las aguas podridas de una de las comunidades más castigadas por el narcotráfico y la miseria de Río de Janeiro había conseguido su sueño de una vida mejor para él y los suyos.

La promesa de un Brasil de ensueño parecía cumplirse e, incluso, la imagen de “Lulinha” fue escogida para acompañar el ambicioso Plan de Aceleración de Crecimiento(PAC) de la ministra Rousseff.

El pasado 3 de julio, “Lulinha” falleció como consecuencia de una sobredosis en un centro de salud de Río de Janeiro que, irónicamente, se encontraba decorado con una imagen suya, sonriente. Una imagen de otra época, cuando nadie hubiera podido imaginar que aquel niño rescatado de la miseria acabaría abandonando la escuela en 2013 y entrando en el mundo de las drogas.

Un mundo que desde pequeño había visto, oído y sentido de mano de los traficantes en las calles de Manguinhos. Uno que, para el pequeño Christiano, resultaba mucho más cercano que los flashes de las cámaras y los apretones de manos con hombres de traje y corbata, aquel día en que unos políticos se acercaron a su comunidad por primera vez fuera de un año electoral. Ese día que parecía el comienzo de algo nuevo.

“Lamento la muerte de Christiano. Que la familia encuentre consuelo en este momento de dolor. Mis sentimientos acompañan a los familiares y a la comunidad de Manguinhos”, escribió Rousseff en la noche de este jueves (23).

Un gesto casi maternal de una presidenta que ve cómo el castillo de arena construido por el Partido de los Trabajadores (PT), desde su llegada al poder 2003, se va desmoronando frente a ella, mientras intenta sostenerlo con sus manos.

Como la arena pasando entre sus dedos, la esperanza de los brasileños en su gobierno se pierde para no volver. La última encuesta de la Confederación Nacional de Transportes (CNT) reveló que la aprobación de la presidenta es de apenas un 7,7% y que el rechazo se sitúa en torno al 78%, un nivel incluso inferior al del ex presidente Fernando Collor de Mello antes de haber sido sometido a un juicio político, en 1992. Un fantasma que parece estar aguardando en la oscuridad a la propia Rousseff.

Después de haber sacado de la pobreza a casi 40 millones de brasileños, de prometerles sueños de igualdad, libertad y oportunidades, el PT  y la presidenta han tocado fondo.

La trágica muerte de “Lulinha” es la expresión más gráfica del país que pudo haber sido y que la corrupción, la avaricia y la incompetencia de muchos echaron por tierra. La historia de “Lulinha” es, en definitiva, la eterna historia de Brasil.

Un país joven que tiene todo para triunfar y que acaba rindiéndose ante los problemas de la desigualdad, las drogas, la falta de oportunidades y el propio peso de su historia.

Quien sabe si en la intimidad del Palacio de Planalto, Rousseff, anoche, derramó una lágrima en honor a Christiano y, de paso, por el país que ha dejado de creer en los sueños.

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El contrato social de los niños http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2014/01/30/el-contrato-social-de-los-ninos/ http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2014/01/30/el-contrato-social-de-los-ninos/#respond Thu, 30 Jan 2014 17:44:07 +0000 http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/?p=751 Continue lendo →]]> POR GABRIEL BAYARRI

Gabriel Bayarri (g.bayarritoscano@gmail.com) es español, estudiante e investigador de la Universidad Federal Fluminense (UFF) y nos acompañará con una serie de textos cada 15 días en los que abordará parte de su investigación sobre las Unidades de Policía Pacificadora (UPP) en las favelas de Río de Janeiro, desde el período anterior al crimen organizado hasta las nuevas formas de pacificación y justicia dentro de las comunidades.

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En la forma que el azar y el viento dan a las nubes, los niños se empeñan en reconocer figuras. La imaginación invade lo real y, tumbados en los tejados de la favela de Santa Marta, en la zona Sur de Río de Janeiro, los niños reconocen desde ovejas hasta fusiles en el cielo: “Un cachorro, una AR-15, un frijol gigante, una zapatilla de deporte, una pelota de fútbol…”.

Durante las últimas décadas,  no era difícil ver a estos niños de 12 años armados con rifles fabricados en Austria, Estados Unidos o España, participando en “la guerra del polvo”, la del blanco, la cocaína y la marihuana, que ha matado a más personas en  Río de Janeiro que la Guerra de Bosnia de 1992.

Niños caminan por el morro de la favela Santa Marta, en la zona Sur de Río. Fotografía: Daniel Marenco/Folhapress

Niños caminan por el morro de la favela Santa Marta, en la zona Sur de Río. Fotografía: Daniel Marenco/Folhapress

El AK-47 es un fusil de asalto soviético, fabricado en más de 14 países; es el arma de fuego de mayor producción de la historia, con cerca de 80 millones de unidades manufacturadas. Diseñado por el ruso Mijaíl Kaláshnikov durante la Segunda Guerra Mundial, debido a su eficacia y precio económico (en el mercado negro se pueden llegar a encontrar a 30 dólares), es comercializado por las grandes potencias en numerosas guerrillas africanas, asiáticas y de Medio Oriente.

En América, es empleado por grupos como las FARC en Colombia o por los cárteles del narcotráfico mexicano. Y en Brasil, aunque no es comercializado, la favela es su principal usuaria.

Por muchos años los niños de Santa Marta fueron las pequeñas marionetas de este sistema maquiavélico de la industria armamentística. El AK-47 era la perla soñada por todos aquellos que se iniciaban en el narcotráfico: símbolo de prestigio, la opción de una vida mejor, resultarle atractivo a las mujeres, el comienzo más temprano de la vida sexual o tener unas zapatillas para practicar deportes. Los afortunados podían limpiar el arma del jefe, montar y desmontar la culata con su kit de herramientas y a veces hasta practicar el tiro contra las ratas.

Las ráfagas de bala alcanzaban con frecuencia el entramado de cañerías que llevaban el agua a toda la comunidad, de un tejado a otro. Así, reparar las cañerías se convirtió en una profesión para los niños, que debían escalar ágilmente entre los tejados, aprovechando después para descansar, observando las nubes en sus formas.

La convivencia es pacífica en Santa Marta, entre los niños y la policía. Fotografía: Ana Carolina Fernandes/Folhapress

La convivencia es pacífica en Santa Marta, entre los niños y la policía. Fotografía: Ana Carolina Fernandes/Folhapress

Los niños “fogueiteros” se encargaban de avisar cuando un extraño llegaba a la comunidad. Para ello cargaban “foguetes” (petardos) y “pipas” (cometas de papel) para soltarlas al aire. Practicaban durante el día en el cercano vertedero de Beirute y tiraban piedras a los gatos. Con su puntería atinada y cargados de cometas, trabajaban en las horas de riesgo de invasión, la madrugada, cuando los traficantes están cansados después de una noche de trabajo, habituados a vivir en el presente, en una alerta instintiva, permanente.

Los “avioncitos” eran los niños que transportaban la droga de un punto a otro de la comunidad, una prueba de responsabilidad, pues tenían vetado el uso de cualquier droga, excepto el pegamento. También complementaban su tarea como “niños mensajeros”, portadores de secretos, o difundidores de chismes en el boca a boca callejero, eran fundamentales en los sistemas de información.

Su ascenso en la jerarquía de la boca de fumo se percibía en la ropa, las marcas dejaban de ser falsificadas, con los ahorros se compraban zapatillas, pantalones y camisetas utilizados por la clase media que vive en el asfalto.

Con la pacificación que se está llevando a cabo desde 2007 en Santa Marta llegaron también los “tiburones”. Las grandes empresas miran ahora a la favela con dólares en los ojos, un posible ascenso social cercano, y están mordiendo en la carne tierna, la de los niños, fácilmente domesticables en materia de marcas para un consumo futuro. La estrategia perversa se disfraza de imagen corporativa, proyectos sociales en los que el niño favelado puede pintar ahora su propia tabla de surf o quitarse los piojos con lociones de marca.

Cuidar a los niños de las favelas es importante para que no caigan en el consumo desenfrenado. Fotografía: Gabriel Bayarri

Hay que procurar que la sumisión infantil no se repita más en las favelas y evitar que el consumo genere un vicio en los niños. Fotografía: Gabriel Bayarri

Los traficantes no siempre reconocían a sus hijos. Los pequeños huérfanos crecían con las madres, se hacían cada día más grandes, pareciéndose cada vez un poco más al padre. A pesar de estos vacíos, la segregación de la favela unía a sus vecinos, a los desplazados. El contrato social, el acuerdo de derechos y deberes, era con la favela, y no con el asfalto.

De esta manera, la pacificación requiere ser acompañada por un nuevo contrato social entre la favela y el Estado. La comunidad no está compuesta por ladrillos, sino constituida por las relaciones entre las medidas de su espacio y los acontecimientos de su pasado. Si en el pasado los niños tenían su contrato con las reglas del tráfico, la pacificación deberá, en cambio, buscar que la sumisión infantil no se repita, y así evitar que el consumo genere un vicio en los niños. Es importante no permitir que se disfrace de acceso a la calidad de vida, a estatus de clase media, y acaben siendo víctimas de la banalidad de las grandes marcas.

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El perro Simón, Paul Walker y la lucha por los clicks http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2013/12/04/el-perro-simon-paul-walker-y-la-lucha-por-los-clicks/ http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2013/12/04/el-perro-simon-paul-walker-y-la-lucha-por-los-clicks/#respond Wed, 04 Dec 2013 17:03:36 +0000 http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/?p=627 Continue lendo →]]> POR PAULA RAMÓN

Cuando la presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, reapareció luego de 40 días de reposo médico tras haberse sometido a una cirugía en el cerebro, lo hizo a través de un video en el cual no sólo mostró su buen ánimo tras la convalecencia, sino también su nueva mascota: un perro de la raza venezolana mucuchíes, regalo de Adán Chávez, hermano del difunto presidente Hugo Chávez.

“Simón”, como fue bautizado el cachorro, tuvo más repercusión en la escena que la misma presidenta. En pocas horas, el peludo había ganado cuenta en Twitter y en dos semanas superó los 10.000 seguidores.

Simón, el perro de Cristina Kirchner, tuvo gran repercusión en la primera aparición de la presidenta argentina tras 40 días de reposo. Fotografía: Reuters.

Simón, el perro de Cristina Kirchner, tuvo gran repercusión en la primera aparición de la presidenta argentina tras 40 días de reposo. Fotografía: Reuters.

En algún momento, imposible de identificar para mí, los perros se volvieron un tiro al piso en el mundo editorial. Los perros venden, más si son cachorros. Prueba de ello es que casi todos los días, alguna noticia sobre canes figura entre las “más leídas” de los portales de noticias online. Junto con la reciente fascinación por los amigos de cuatro patas, al revisar las cinco noticias más vistas de sites de noticias, aparece otra tendencia: informaciones que, mientras más inútiles, parecen más difíciles de resistir, casi un gusto culposo para más de uno.

Si bien algunos portales se limitan a relanzar cables, sin mucho sentido, de gatos tontos que se golpean contra ventanas o de pavos que por ilusión óptica resultan más grandes que un estádio, otros medios van mucho más allá y conceden real importancia periodística a casos como el “cerdo diabólico”, acusado de atacar el ganado de varios vecinos de una aldea colombiana.

Así, en julio pasado, un reportero de la cadena Caracol, una de las más importantes emisoras de radio y televisión de Colombia, fue -micrófono en mano- a enfrentar al puerquito que tenía atemorizada a la región. El reportaje (porque así fue) apareció en el noticiario y se volvió en pocos minutos trending topic en Twitter.

La fórmula de la noticia fantástica puede ser criticable para muchos: poco contenido, muchas imágenes, un ángulo sensacionalista y listo. Si hay video (de no más de tres o cuatro minutos), mucho mejor. Pero para otros, la premisa de defensa seguirá siendo que “al pueblo hay que darle lo que pide”, y lo que pide -en estos casos- se traduce en cerdos diabólicos, perros que visitan difuntos y deslices de actores o cantantes, de preferencia esos que antes de los 20 años ya han sido expuestos a casi cualquier tipo de situaciones.

De cualquier manera, en estos tiempos competitivos, la tendencia es comprensible. Comprensible porque los clicks son necesarios para subsistir y, en América latina, parecemos estar convencidos de que no hay forma de obtener tránsito virtual sin ayuda de estas piezas. También parece que los editores de los portales están segurísimos de que la audiencia no quiere leer, por lo que dos o tres párrafos son suficientes, especialmente si están acompañados de fotos llamativas.

El "Coronel Miau" exhibe orgulloso su certificado Guiness otorgado por ser el gato más peludo del mundo. Fotografía: Reprodução/Instagram/colonelmeow

El “Coronel Miau” exhibe orgulloso su certificado Guiness otorgado por ser el gato más peludo del mundo. Fotografía: Reprodução/Instagram/colonelmeow

Hace cuatro años, el fundador de la revista peruana Etiqueta Negra, Julio Villanueva Chang, reflexionaba en una entrevista sobre cómo la rapidez de los tiempos hacían del periodismo y de los textos de largo aliento un desafío por resolver.

“En tiempos en los que las noticias llegan en forma de alertas de mensajes de texto a tu teléfono celular, sea un iPhone o un modelo barato con cámara, o que desde ellos puedes enviar videos en tiempo real de lo que estás haciendo en una cocina, no puede haber más que una gran incertidumbre sobre el sentido del periodismo y sobre cuál será la ocupación de un reportero de agencia en el futuro. Para un empresario de medios de prensa, y sus asesores, la mayor preocupación sigue siendo inventar una estrategia publicitaria para ganar dinero o, al menos, para no perderlo”, comentaba Villanueva.

En los últimos años, surgieron varios esfuerzos en América latina por ensalzar los textos largos y sustentados, crónicas minuciosamente compuestas y con temas que intentaban trabajar enfoques más innovadores. Hay quienes consideran estas iniciativas como arrogantes, preparadas por periodistas y editores que escriben apenas para sus colegas. No siempre se trata de una elite editorial, pero la dificultad por hacer viables y sustentables algunos de estos proyectos puede llevarnos a reflexionar sobre cómo comunicarse con los lectores, claro, sin intentar competir con alguna noticia de la cantante y actriz estadounidense Miley Cirus, porque eso sería un esfuerzo inútil, y un falso dilema.

Las andanzas de la cantante norteamericana Miley Cirus están siempre entre las noticias más leídas de los portales online. Fotografía: Andy Kropa/Invision/AP.

Las andanzas de la cantante norteamericana Miley Cirus están siempre entre las noticias más leídas de los portales online. Fotografía: Andy Kropa/Invision/AP.

Sólo para poner como ejemplo, en este momento que escribo estas líneas, tres de las cinco noticias más leídas del portal G1 son sobre la muerte del actor norteamericano Paul Walker, ocurrida el sábado pasado, hace ya tres días. Las noticias sobre el resultado que obtuvo Brasil en la evaluación del sistema educativo o la caída del PIB nacional, que ocupan los principales titulares del site, no aparecen en la lista. Ya en Folha de S. Paulo, la nota con más clicks es sobre el aplicativo “Tubby” que servirá para evaluar perfiles de mujeres registradas en Facebook.

Para muchos que trabajan en la producción de noticias, el desafío sigue siendo cómo figurar entre las cinco noticias más leídas, pero sin tener que entrevistar al cerdo diabólico.

El periodista Leonardo Sakamoto comentaba el tema hace unas semanas atrás en su blog. “La cantidad de información disponible en Internet dejó claro que tendremos que ser más atractivos para que el contenido que ofrecemos sea consumido en detrimento de mucha cosa que circula. Las personas van a leer cada vez menos periódicos y revistas enteras, con el orden jerárquico y vertical que los medios imponen, y consumirá información de forma horizontal, a través de páginas y blogs que respaldan en sus redes sociales. Llegó la hora, entonces, para quien aún no se dignó, de bajar del pedestal”.

Los tiempos han cambiado nuestra forma de pensar, escribir, presentar y consumir noticias. Lo que se mantiene igual es el objetivo: que las palabras lleguen a algún lugar. Simplificar el lenguaje para conectar con el lector es, entonces, una propuesta a considerar, porque -citando de nuevo a Sakamoto- “¿quién dice que el periodismo debe ser sagrado y no mundano?”.

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La devaluación y el futuro de Dilma http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2013/09/06/la-devaluacion-y-el-futuro-de-dilma/ http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/2013/09/06/la-devaluacion-y-el-futuro-de-dilma/#respond Fri, 06 Sep 2013 12:00:44 +0000 http://brasilcomn.blogfolha.uol.com.br/?p=222 Continue lendo →]]> POR NATALIA FABENI

Una amiga argentina que trabaja en una multinacional en São Paulo y cobra en dólares me contó la semana pasada que desde hace unos meses consigue ahorrar una pequeña parte de su sueldo, algo que antes no podía hacer.

Ayer, en un supermercado del barrio de Barra Funda, mientras esperaba pagar mi compra semanal, mi compañera de fila, Dona Tereza, se quejaba de los precios y me dijo que entre lo que paga de alquiler y lo que cuesta la comida el dinero ya no le alcanza.

Ni mi amiga, ni Dona Tereza siguen de cerca las noticias económicas. Mucho menos compran revistas de actualidad política, como Época o Veja, que la semana pasada llevaron en sus portadas reportajes sobre la caída del real frente al dólar.  Sin embargo, las dos sienten en sus bolsillos (una para bien y la otra para mal, claro) que el real se devaluó y está dejando de ser una de las monedas más codiciadas, como lo era hasta hace unos años.

El mes pasado, la moneda brasileña llegó a cotizarse hasta 2,45 unidades por dólar y se colocó en sus niveles más bajos frente al “billete verde” en cuatro años. Desde comienzos de 2013, el real se depreció cerca del 20% en relación a la moneda norteamericana y la gran preocupación del gobierno de Dilma Rousseff es el impacto sobre la tasa de inflación, que se llegó en julio a un 6,27%, ligeramente por debajo de la meta fijada, que es del 6,5% al año.

El Ministro de Hacienda brasileño, Guido Mantega, ya había admitido hace unas semanas una “minicrisis” y dijo que “el aumento del dólar podrá tener impacto sobre los precios, en caso de que la depreciación del real se intensifique”.

Fila en un supermercado de São Paulo. Edson Silva/Folhapress

A partir de ahí, el gobierno de Dilma sacó toda su artillería para hacerle frente a esa subida del dólar y calmar los ánimos, cuando falta poco más de un año para unas elecciones en las que Rousseff busca la reelección.

El miércoles pasado, la propia presidenta rompió el silencio y sostuvo que Brasil tiene las armas para enfrentar la disparada del dólar, entre ellas, 372.000 millones de “billetes verdes” en reservas internacionales que sirven como colchón contra la volatilidad de la moneda norteamericana.

Su gobierno también anunció el lanzamiento de un programa para intervenir en los mercados de divisas mediante la inyección de hasta 60.000 millones de dólares en lo que resta de 2013 para frenar la volatilidad de los tipos de cambio.

En este nuevo contexto internacional, en donde las economías que estaban en crisis comenzaron a dar signos de recuperación, y a partir de la subida de la tasa de interés en los Estados Unidos, los capitales empezaron a migrar de los países emergentes, como Brasil, lo que provocó el debilitamiento del real.

Eduardo Andrade, doctor en Economía y profesor del Instituto de Enseñanza e Investigación (Insper), me explicó, además, para una nota que publiqué esta semana en el diario La Nación que el real no solo “acompaña el movimiento ocurrido en otras economías como India, Indonesia y Sudáfrica” sino que también “Brasil dejó de ser el niño mimado del mercado, como reflejo de las políticas equivocadas del gobierno deRousseff, que abandonó el trípode económico que venía desde la época deFernando Henrique Cardoso (y que continuó Lula da Silva), basado en un régimen de metas de inflación, tasa de cambio flexible y equilibrio fiscal. El ambiente macroeconómico se deterioró y la confianza de los empresarios está en baja. En este escenario, no es sorprendente que el real sufra más fuertemente”.

El gobierno de Rousseff está especialmente preocupado porque la devaluación del real podría elevar la tasa de inflación, y con eso cada ciudadano perdería poder de compra. Pero no sólo se verán afectados los viajes, las compras en el exterior y las personas y empresas con deudas en dólares.

El economista y profesor de la Universidad de Sao Paulo (USP) Manuel Enriquez García lo ilustró de la siguiente manera: “Aquellos acostumbrados a comer carne argentina o ir a una pizzería pronto sentirán el impacto de la devaluación, porque las materias primas, que deben ser adquiridas en los mercados externos en dólares, van a costar cada vez más reales”.

De acuerdo con los analistas, y con el sentimiento del día a día en la calle, la verdadera alarma para Dilma es que frente a la pérdida de poder de compra, los brasileños tengan que ponerle un freno al consumo, lo que podría llegar a costarle su reelección el año que viene. Es así que todos, principalmente la presidenta, van a estar pendientes de cómo evolucionarán las medidas tomadas hasta ahora para contener la disparada del dólar.

El miércoles, tras sufrir un rebote, la moneda brasileña se apreció 0,16% y cerró en 2,356 reales por unidad. Ahora, más que nunca, toman sentido para Rousseff las palabras pronunciadas por un asesor de Bill Clinton durante la campaña presidencial de 1992, cuando le ganó la elección a George H. W. Bush (padre): “Es la economía, estúpido”. Tal como me comentó Andrade, “los electores votan en función de sus perspectivas económicas”.

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