Jair Bolsonaro, más que un personaje, un estratega
18/12/14 10:36POR EDU SOTOS (@Edu_Sotos), DE RÍO DE JANEIRO
La primera vez que entrevisté a Jair Bolsonaro fue el 31 de marzo de este año y no supe qué pensar. Rodeado de una multitud de ancianos exmilitares y personas arropadas en la bandera de Brasil parecía un líder religioso más que un político. Sus correligionarios lanzaban gritos a favor del regreso del régimen militar y contra la “dictadura marxista de Lula y Rousseff”.
Era el 50º aniversario del golpe militar de 1964 contra el presidente João Goulart y pensé que aquella sería la única vez que tendría que enfrentarme al discurso más extremista que jamás había escuchado en Brasil.
Sin embargo, esta misma semana volví a sentarme frente a quien es hoy el diputado federal más votado en Río de Janeiro, representante del Partido Progresista (PP) y probablemente el político más mediático del país.
Su trato, especialmente amable y atento con la prensa, puede llevar a pensar que reserva su discurso incendiario para las sesiones de la Cámara de Diputados o para las manifestaciones contra el gobierno del Partido de los Trabajadores (PT).
Pero no, a Bolsonaro le encanta hacer ruido y llamar la atención. Es por eso que la prensa, en particular quienes trabajamos para medios extranjeros, somos siempre bienvenidos a la hora darle luz a sus polémicos argumentos.
En las entrevistas con Bolsonaro que realicé esta semana, tanto para la agencia rusa Sputnik como para “El Periódico” de Catalunya, no pude evitar incluir esta frase que resume perfectamente su discurso: “Dilma Rousseff presenta un banquete a los pobres durante la campaña y después les decapita el Estado Islámico”.
En la visión de Bolsonaro, argumentos que en algunos países de Europa podrían llevarlo a la cárcel, son para él completamente válidos. El diputado no dudó en señalar, por ejemplo, a Dilma Rousseff como “una terrorista” que “financia dictaduras marxistas en toda América Latina” a través de sus intercambios con Cuba.
Para él, programas como “Mais Médicos” o “Mais Especialistas” solo sirven para entregar 1000 millones de reales anuales a la dictadura de la isla y con ello poder traer a Brasil a 11.000 cubanos “muchos de ellos militares y espías”, entre ellos la famosas “Avispas Negras” o fuerzas de elite de Fidel Castro.
Tras 10 minutos de explicación conspirativa, decidí cambiar el rumbo de la conversación hacia los problemas sociales que atraviesa Brasil.
En este sentido, el diputado fue claro al afirmar que “el gobierno de Rousseff pone a negros contra blancos, pobres contra ricos, norte contra sur, homosexuales contra heterosexuales y padres contra hijos”. Un alegato que sorprende al proceder de un político al que la opinión pública considera racista, homófobo y ultraconservador.
Descubrí que la verdadera fijación de Bolsonaro es la política educacional del PT y se mostró muy molesto con lo que llamó el “kit gay” o programa de educación sexual que el gobierno de Rousseff elaboró con la colaboración con los movimientos LGBT, y que le valió en 2011 un agrio enfrentamiento con el diputado del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), Jean Willys.
Visiblemente alterado y con gran lujo de detalles insistió en explicar las ilustraciones supuestamente “pornográficas” de los libros de texto en Brasil. Para Bolsonaro, los dibujos de “niños indios desnudos jugando” son una clara incitación a la pedofilia y a la homosexualidad.
En un momento dado admitió que su máxima preocupación en estos momentos sería la aprobación del proyecto de ley que criminaliza la homofobia.
“Les daría un poder enorme a los homosexuales. Imagina que un cura lea un fragmento de la Biblia contra la homosexualidad, con esta ley podría ir a la cárcel”, explica el ferviente católico que, sin embargo, reiteró que su problema no es con la homosexualidad sino con “la educación tendenciosa” y con las “leyes injustas”.
Llegado este punto, uno comienza a pensar si el discurso extremo, centrado en los ataques al gobierno y la corrupción, aliñado con un claro componente conservador, no podría arrancar votos en un país hastiado por los escándalos y con un fuerte aumento de las iglesias evangélicas.
Ya lo vimos con Jörg Haider en Austria o Jean-Marie Le Pen en Francia. Es en las aguas revueltas de la recesión económica y la crisis social donde los discursos extremos encuentran el caldo de cultivo ideal. Y todo parece indicar que en 2015 no faltarán estos componentes. Bolsonaro lo sabe y se prepara para aprovechar la situación.
Mi impresión sobre Bolsonaro, tras mi segundo encuentro y pese a la notoriedad que ha ganado, no ha cambiado demasiado. Detrás de esa imagen de militar con ideas fuertemente reaccionarias y obsesionado con el orden, se esconde un político ambicioso y oportunista que no dudará en continuar su estrategia de caldear el panorama político brasileño con excéntricos discursos para allanar su camino en la carrera política.
Al preguntarle hasta dónde quería llegar, el diputado, que ya prepara su salida del Partido Progresista, sonríe y se relaja. “Hasta donde llegue”, responde.
Bolsonaro, el diputado más votado de Río de Janeiro no se conforma con el lugar que ganó en Brasilia y fija su mirada en el Palacio de Planalto, al que aspira llegar en 2018. Parece que habrá que comenzar a acostumbrarse a sus incómodas palabras, porque este militar lo que promete es dar pelea.
Deus nos livre desse filhote da Di t adura. Soltaria todos os fogos do mundo pela sua cassação, uma vez que faz apologia ao estupro e pretende a volta dos anos de chumbo que nos levaram ao fracasso e à moratória.
Apologia nada, foi a Maria do Rosário que chamou ele de estuprador! Como se agora com os Petralhas não estivéssemos quebrados e roubados! Não ao Bolivarianismo sinico do PT!
infelizmente no Brasil ser honesto-querer ordem-disciplina-e outros procedimentos corretos e ser homofobico-nazista- etc—o que vale e essa pouca vergonha que vemos nos tres poderes que o pt esta impondo ao Pais-
Na medida em que sua violência verbal se dirige só contra o PT, ele ganha simpatia da direita mais moderada. É preciso monitorar isto.
No segundo parágrafo está ‘ 70º aniversario del golpe militar de 1964 “.
É 50
É verdade, muito obrigada.
Muito bom o artigo. Oferece um visão geral da “persona” Bolsonaro e analisa com propriedade e conhecimento as intenções do político. A forma de atingir seus objetivos não difere de nenhuma outra linha de pensamento, qual seja o poder a qualquer custo. E pelo andar da carruagem não se surpreendam se ele conseguir, uma vez que o que temos hoje a nos conduzir é um desastre.
É verdade que o Brasil está mergulhado no mar de lama onde ética, moralidade e respeito com as coisas públicas estão atoladas. Nunca se viu neste país tanta podridão na política e na gestão das coisas públicas. Daí, quando alguém se levanta contra tudo isto, passa a ser admirado. Quando a frase dirigida a deputada, foi resposta a uma ofensa dirigida por ela ao deputado, quando o chamou de estuprador. Portanto, foi recíproco.
Uau….. a falta de argumentos desse blog/post é impressionante! Já dizia teu líder, o sanguinário-maníaco-psicopata Lênin: “Xingue-os daquilo que você é, acuse-os daquilo que você faz”. Ninguém segue tão a risca essa instrução hoje em dia do que a mídia esquerdista brasileira, idiotas úteis, suicidas que apoiam um governo cujo maior objetivo atualmente é a regulação (censura) da mídia. Jornalistas que apoiam tal governo só podem ser suicidas, ou acreditam que terão suas fartas verbas pra defender essas ditaduras quando a economia petista entrar em colapso?
Te has olvidado decir que estamos hartos de tanta corrupción, tanto robo y mala gestión de lo publico.
No sé por que te propones hablar de Bolsonaro, si no hablas antes de como está el pais. Hundido en una crisis política, dividido por “PTistas” y “NO PTistas”. Hablar de lo que hace Bolsonaro sin antes hablar de la situación del pais, es como acusar sin pruebas.
Bolsonaro es hoy, la voz de aquellos que estamos hasta la coronilla de los abusos del actual “DESgobierno”.
Bolsonaro não tem nenhuma chance de vencer uma eleição presidencial. Não existem tantos fascistas assim no Brasii e, mesmo entre os evangélicos, muitos não são intolerantes e homofóbicos.
O brasileiro adora esse tipo de moralismo… o falso.
Enrustido de seriedade, mas que não passa de oportunismo e engana trouxa.
Que sejamos moralistas ferrenhos, politicamente corretos em tudo… mas que jamais percamos a educação e o respeito. Acho triste o pessoal não saber diferenciar inaceitação de preconceito…
Enfim, pra este sujeito ser o mais votado do RJ, só prova que temos os representantes que merecemos. Será preciso saturar destes tipos para alguma coisa mudar neste país.
Gustavo, você é mais um ignorante ou mal-intencionado ou os dois mesmos, no minimo, deve ser filiado a algum desses partidos que mais atrasam o país como o PT, PSOL E PCdoB.
Repete a lenga-lenga da esquerda hipócrita demagógica, a inversão de valores, a distorção dos fatos, o vitimismo, a intenção é sempre segregar a pessoas, apoiados por setores de esquerda da imprensa, apenas os incautos ou estupidos se deixam levar por esse discurso, ou seja, como o amigo acima citou, o mantra da esquerda, ensinado por Lenin: “Xingue-os daquilo que você é, acuse-os daquilo que você faz!”.
Num país de inversão de valores com um governo/mídia que claramente apoia e defende criminosos, quem se levanta contra tudo isso, defendendo a moral, a ordem, a ética e os valores é taxado de intolerante, preconceituoso.
No mais, é engraçado, ver as viuvas de Che Guevara, os vagabundos, os imorais e antiéticos, os maconheiros, os corruptos e criminosos, em resumo, os “descolados” da esquerda, tentando, inutilmente, desconstruir o Jair Messias Bolsonaro, vocês não têm credibilidade, a esquerda por si só, já é sinônimo de patêtica!
Vejam o tanto que a matéria é tendenciosa: no kit gay a que se refere o Bolsonaro existe coisa muito, muito, pior do que ilustrações de crianças índias desnudas. Não obstante a autora mostra isso como se fosse o supra sumo das provas apresentadas pelo Bolsonaro, com intuito de ridicularizá-lo. Além disso ela afirma que ele diz coisas que, em outros países, poderiam levá-lo à cadeia, tais como chamar uma ex-terrorista de terrorista (????) e dizer que ela financia ditaduras (?????). Será o que acontece em outros países com pessoas que se envolvem em escândalos bilionários?